jueves, 28 de noviembre de 2024

Limpieza

 

¿Querrá la Flor de Loto

crecer en el medio del fango?

¿Será que es bella por eso

o a pesar de eso?

Lo cierto es que a veces

es necesario

meter los pies en el barro

Hundirse bien al fondo

hasta rendirse y soltar toda expectativa

Embarrarse bien bien

Chapotear

Jugar como los chicos

 

Después un buen baño

El agua cae sobre el cuerpo

Se desliza hasta el suelo

en una cascada marrón que se escurre

burbujeante

por el desagote

 

Nos debemos

más temprano que tarde

encontrar

un lugar bien nuestro

con menos lodo

martes, 26 de noviembre de 2024

No todas las nubes anuncian tormenta

 

Acostada  en el pasto

juego a encontrarles  formas

a las nubes

Perros

Jirafas

Ovejas

Manos gigantes que juegan

con pelotas de copos de algodón

 

Adoro la despreocupación

que ostentan

algunos

Yo también quiero

vivir en las nubes

En esa levedad etérea

 

Voy salticando

entre nubarrones escalonados

Un sofá blanco de nimbo me espera

en medio de la bruma

Recuesto los brazos a los costados

 sobre dos nubes pálidas

Mis pies se relajan

El cielo acompaña

lunes, 25 de noviembre de 2024

Desenredo

 

No dejar

que la maraña

enmarañe

Desarmar la madeja

Devanar el caos

 

Formar

ovillos naranjas

violetas

azules

 

Entretejer

coloridas texturas

que abrazan

alegran y confortan

domingo, 24 de noviembre de 2024

Travesía

 

Quiero viajar

a donde me lleve el viento

 

Mis rulos bailando con la brisa

Tu mano en mi rodilla

Los mates compañeros

 

La ruta

va quedando atrás

mientras nosotros avanzamos

 

El paisaje acompaña

como una película

de árboles verdes

 vacas y caballos

algún cableado a lo lejos

 

Nos miramos y el aire se llena de sonrisas

Vamos

por buen camino

La magia de lo posible

 

Un temblor esencial me impide

el trazo fino

La mano intenta

forrar cajas y cuadernos

de hijos en edad escolar

Hay tutoriales

dicen

los habilidosos

No entienden

que mi cerebro no logra

comunicarle a mi cuerpo

lo que tiene que hacer

 

Mis hijos se acostumbran a cajas abombadas donde no deberían

Y a papeles arrugados donde la lisura es condición

Las maestras se resignan

a mi talón de Aquiles

mi discapacidad manual

mis brazos temblorosos

que derraman agua caliente fuera del mate

y dejan caer fuentes con ensalada rusa

que estallan en el suelo

desparramando vidrios, papas y mayonesa

 

La cursiva da pelea y gana

Mis manos tembleques crean mundos sobre el papel

Imágenes salen de mis dedos

que empuñan con firmeza

la birome

La escritura me rescata

Me permite

describir la sutileza

de lo pequeño

Encontrarle la cadencia a cada momento

Sin ansiedades

lentamente

Escuchar

el borboteo del agua

subiendo

desde la pava eléctrica al termo

el cris cris de la tapa a rosca

anticipo de mates

amargos

calientes

lavados

como me gustan a mí

 

Observar

el caer de una pluma

girando

hasta llegar al suelo

y ser atrapada

por la zarpa de una gata

 

Sentir

el calorcito al acercar

la cola a la estufa

El olor de la hilacha del pulover

que muere lentamente

sobre el fuego

 

Saber

que mis manos tienen la magia

de lo posible

jueves, 21 de noviembre de 2024

EL FUEGO PURIFICA, EL AGUA LIMPIA

 Las llamas tiñen de rojo el cielo

Heridas ya cerradas vuelven a sangrar

La purga es necesaria

Hay que arrojar al fuego

lo que ya no sirve

Una hoguera que danza

al son de los desechos crepitantes

que como hojas de otoño

se van chamuscando

se arrugan

se retuercen

y finalmente callan


Gotas de lluvia devienen tormenta

que lleva las cenizas al mar

Altura

 

Atravesar

espinas y cardos venenosos

Agarrarse fuerte de las piedras

Trepar

hasta que el camino

se convierte en pradera

Inhalar  el aire puro

la calma de haber dejado atrás la ponzoña

Disfrutar

al fin

la montaña y el viento

lunes, 18 de noviembre de 2024

En carne viva

 

Llamaradas dispersas amenazan

el aire a mi alrededor

Intento apagarlas

pero solo cuento

con tapitas de botellas

El humo sofoca toda lucha

Las quemaduras

al principio son solo molestia

que se profundiza cuando cae la tarde

A la noche no soporto las sábanas

Te veo venir al fin con un balde

de nafta

que arrojás

sobre los escombros sobrevivientes

Te veo prender un fósforo

Gritás que estás cansado

Yo estoy

en carne viva

jueves, 7 de noviembre de 2024

Parciales

 

El ruido que hace el resaltador sobre el texto que estoy estudiando le llama la atención a mi gato. De un salto que me sorprende se sube a la mesa. Estruja su hocico frío contra mi mano derecha, como si quisiera saber qué estoy subrayando. Yo subrayo todo. La primera lectura subrayo con lápiz; la segunda, con resaltador amarillo; y esta, la tercera, con verde. Resaltadores fosforescentes. La cuarta lectura es imposible después de todo ese pastiche.

Ahora el gato enloqueció. Corre como un endemoniado por toda la casa. Se afila las uñas en las sillas. Corre otra vez. Se afila las uñas en el sillón blanco, adquirido hace poco y ya arruinado por los estados de humor erráticos del felino.

Pienso que debo dejar de estudiar y calmar al gato. Pienso que no debo usar al gato como excusa para dejar de estudiar.

Pienso que de repente se hizo silencio, salvo por la chicharra del ascensor que suena, como siempre, para que nadie deje la puerta abierta. El tema es que apenas abrís ya empieza a sonar. Yo ya la tengo incorporada, la gente que sube por primera vez se sorprende de lo pronto que suena. Todos los vecinos se quejan, pero la alarma es parte del folclore del edificio, igual que las quejas.

El gato ya no corre. Está acostado en el sillón mientras me observa, con una tranquilidad pasmosa. Ni rastros quedan del demonio de Tasmania que tiraba adornos de mi biblioteca hace apenas segundos.

Agarro el resaltador verde y sigo leyendo.

 

martes, 5 de noviembre de 2024

Punto de fuga

 

Rejunte de locos

rotos

perdidos

Mi cabeza no quiere

estar ahí

Fantasmas hambrientos

Perros con máscara de lobos

y colmillos chorreando saliva

Gargantas gélidas

provocan

fuegos que arrasan bien adentro

 

Corro

Esquivo todas estas flechas

paralelas que apuntan

a mí

y caen

inertes

en el pasto negro

de la noche