jueves, 14 de mayo de 2020

Superhéroes capitales

Les quiero presentar a los superhéroes capitales. Son siete, por supuesto:
 
Sexyman perdió un poco de su poder ante la imposibilidad de contacto. A pesar de todo, no pierde las esperanzas. Anda con su super-arma para estos momentos: el sexting mortífero. Sexyman es muy bueno sexteando. La persona que queda atrapada en ese chat, no puede dejar de escribir... hasta que se pudre. Convengamos que no es lo mismo (dicen, me contó una amiga). Pero sexymán tiene tecnología de alta gama, por lo que puede seguir por bastante tiempo. Y parece que está logrando varios adeptos ante la falta de alternativas. Veremos. Está difícil la cuarentena.
 
Fiacamán, es un superhéroe muy presente en estos tiempos que corren. Su gran poder, su arma mortal, es hacer que el tiempo transcurra de manera diferente a cómo lo percibíamos antes. Los horarios habituales perdieron su razón de ser y andamos todos con los horarios cambiados. Otro de sus poderes es la sueñonita, que nos hace tener sueños muy locos, muy extraños, que a veces recordamos y muchas veces no. Pero sabemos que los tuvimos. 
 
Engullín, come todo el tiempo. Porque le gusta mucho, no siempre es por ansiedad, aunque algunas veces sí. Su archienemigo es esta sociedad gordofóbica. Su principal poder es el autoestimador: hace que cada persona se quiera y se guste tal como es. Un rayo del autoestimador y la persona se da cuenta de que no es la balanza la que determina si es linda o fea. Que la belleza pasa por otro lado. Otra de sus armas es el curvilover, que hace que ames hasta tu celulitis o tu cintura-salvavidas. Su gran opositor es la sociedad de consumo, que sufriría un gran golpe si la gente se quisiera tal cual es. También tiene como enemigos a los gordofóbicos no asumidos que esgrimen el estúpido argumento de la salud, donde flaco igual a sano y gordo igual a enfermo. Engullín prefiere a los que van de frente, porque se los puede distinguir mejor y mantenerse lejos de ellos. 
 
AngryDevil y Envy Woman andan siempre juntos. Enojados porque no pueden ser como los superhéroes de verdad, a los que envidian. Podrían formar una pareja, si no fuera porque se la pasan enojándose y envidiándose entre ellos y a los demás. Quedan agotados, pero ni Fiacamán puede ayudarlos, tan grande es la fuerza destructora de esta dupla. 
 
Quierolótodo es el villano de este grupo (siempre hay un villano). Su poder es muy destructivo, produce un afán o deseo desordenado de poseer riquezas, bienes, posesiones u objetos de valor abstracto con la intención de atesorarlos para uno mismo, mucho más allá de las cantidades requeridas para la supervivencia básica y la comodidad personal (Wikipedia dixit). La "kriptonita" de Quierolótodo es la satisfacción de disfrutar lo que uno tiene y sus logros personales. Y el conocimiento de que no es necesario tanto para ser feliz. Eso es mortal para él, lo anula totalmente. 
 
Por último, Superyo, que se cree lo más, pero en realidad es esclavo de lo que él mismo se autoimpone. Lo considero más un antihéroe, porque a veces puede ser un tanto patético. Pero él pidió estar en esta lista, porque su jefe, Ego, no le permitía quedarse afuera.
 
Bueno ya los conocen. Mi consejo es utilizar sus servicios con discreción, como todo. 
 
Por suerte, estamos bien protegidos (?).

No hay comentarios:

Publicar un comentario